martes, 13 de marzo de 2012

La ira de Dios

2012 es un año escatológico. No, no me refiero a que huela a mierda -que también-, lo afirmo en la acepción milenarista del término; la del fin de los tiempos. Y es que como los mayas predijeron que el 21 de diciembre se acababa su calendario amenazando con grandes cambios sociales y parece que van camino de producirse, la indignación de los obreros y la clase media va en aumento en la misma proporción que la desigualdad y la injusticia social reina en nuestra sociedad. Tan lejos llegan las “oraciones” de los “desamparados” que hasta “Dios” se ha indignado. Las comillas –como adivinaréis a continuación- son para reflejar que no me refiero al Sumo Hacedor sino a nuestro Administrador Concursal que se reunió el jueves pasado con los abogados de MC Ediciones/COEDIS y los representantes de los trabajadores.
En esencia, se puede decir que Dios está cabreado; ha pedido que se le justifiquen algunos puestos de trabajo que no son, precisamente, de los curritos; ha pedido mayor diligencia en los asuntos contables, que los acreedores crecen y crecen (como los peces en el río que beben y beben... y vuelven a beber) y que así no se va a poder dar carpezado a este Concurso “Voluntario”.
Ya se sabe que Dios está en todas partes y, por esa razón, también lee lo que InsideMC cuenta en su blog, sobretodo en lo que a las sociedades “instrumentales” se refiere. En el post pude conocer un montón de nombres: Alphabetum, Sex Books, Hilsin, Darlene y Polar Tibsa.
En ese sentido, mientras estaba de vacaciones estos días recibí una llamada con número oculto de InsideMC. Sé que eran ellos porque su voz se correspondía con la de uno de los miembros con los que tuve oportunidad de reunirme en Barcelona. Ponía el acento en los flujos de dinero constante a lo largo del año (pequeñas cantidades, eso sí) entre algunas de esas sociedades y nuestras empresas. Fruncí el ceño. (Me vais a permitir que no siga por ahí... al menos todavía, es por seguridad de los verdaderos “Gargantas profundas” de este asunto).
La llamada obedecía a que querían saber qué había de cierto en que la Nueva MC iba a tener sede social en los alrededores del céntrico Paseo de Gracia.... ¿Cómo puedo saberlo yo? Eso Dios lo sabrá... O debería saberlo porque igual sucede como con uno de los locales que sirvió de aval para SGEL y que resulta que no gozaba de la aprobación de Nuestro Señor para tal maniobra.
Al final sucederá que “alguien” sufrirá la ira de Dios que, según Isaiah 66: 16 reza: “Porque el SEÑOR juzgará con fuego y con su espada a toda carne; y los muertos del SEÑOR serán multiplicados.
Parece que la advertencia ha sido tomada en serio y que este fin de semana se ha tenido que trabajar de lo lindo para ofrecer documentación. Mientras tanto, los trabajadores nos vemos abocados al FOGASA a un ritmo cada vez más trepidante... si Dios no lo remedia.

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