Parece que, en efecto, desde el pasado mes de enero el trabajo brilla por su ausencia, no sólo en MC Ediciones o COEDIS, sino en el mundo periodístico en general. La crisis se está cebando -y de qué manera- en nuestro sector y los Concursos de Acreedores están al orden del día. Algunos de ellos, como es el caso del diario Público, han terminado en liquidación arrojando al PocoJob a más de un centenar de periodistas. Cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar... el refrán viene al caso por un chascarrillo que anoche aterrizó en mi bandeja de entrada. El mail procedía de alguien que, no formando parte del penoso proceso que estamos viviendo, me confidenciaba que a String “y familia -que debían ser avalistas- les han incautado bienes para pagar algo de la deuda que, como bien sabes, es descomunal. Y parece ser que, aunque se quieran "rescatar" algunas revistas de la casa como Más Allá para que sigan saliendo bajo otra editorial, eso no va a ser posible. Los administradores concursales piensan "finiquitar" todo en cuanto acaben su gestión (¿dos meses como mucho?). Más Allá forma parte del lote, no se puede separar. Lo mismo se aplica a las demás revistas ahora supuestamente "rescatadas".
Es como cuando desahucian una casa, no puedes salvar un mueble ni un cuadro, ni nada. Está todo "precintado" y punto.
Así las cosas, el “proyecto” de la Nueva MC cae en desgracia antes de ver la luz, antes de poder hacer frente a la mochila de los 10 millones de euros (que dicen los abogados de la empresa, pues en los autos del concurso se habla de más de 15 millones de euros).
En ese supuesto, poco importa que hayan incluido en el plan de (in) viabilidad a un chofer, o a una String más desconocida que el propio InsideMc porque, si Dios no tiene fe en este proyecto que tiene más jefes que indios, es evidente que TODOS, los de la luz y los del lado tenebroso, nos vamos al PocoJob y el mercado está muy muy duro.
Segui @josepguijarro
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